Las llamadas combis, esos colectivos que te transportan al lugar que deseas pagandole cincuenta centimos, un sol, un sol veinte, un sol cincuente, y si tiene mala suerte y cara de tarado, dos soles.
Hoy, después de tiempo, decidir ir al Olivar de San Isidro, a reencontrarme con mis amigos, a los cuales no veo desde el 6 de Febrero del 2009, un día antes que caiga enfermo con la varicela.
Llegué a la Avenida Faucett, o, cómo se le conoce criollamente "Fose", esperé la Jv, una línea de transporte que va hasta Javier Prado, subí al dichoso carro, y como "La seguridad ante todo", quedé de pie, pero después de diez minutos de viaje, pude sentarme.
Bajé en la intersección de la avenida Javier Prado con la avenida Arequipa, casi ahogandome entre tanta gente que pudo hacerse un espacio en aquel carro. Me acerqué a una vendedora ambulante a comprar un halls rojo, y le pregunté "Señora, disculpe, ¿Dónde tomo un carro para canal nueve?", la señora me indicó todo lo que debía hacer para llegar al paradero y tomar mi carro.
Caminé hasta el paradero, paré la 18, un carro blanco con dos franjas celestes, azules o turquesas, depende de que tan nuevo esté el carro. Antes de subir le pregunté a la cobradora "Vas por canal 9, ¿No?", ella me aseguró que iba por ahí, así que despreocupadamente subí y me senté.
Pasados diez minutos, me di cuenta que ya debíamos estar llegando, me asomo por la ventana y me doy cuenta que estabamos llendo por el lado contrario, así que bajé.
Cuando estaba en una Avenida que en mi vida había visto, me acerqué a una ferreteria y pregunté al señor que atendía "Disculpe señor, ando medio perdido, ¿Sabe que carro puedo tomar para ir a canal 9?", el señor me señaló la esquina cruzando y me dijo que tomara la 18, y así lo hice.
Estando ya dentro de la 18, me senté pegado a la ventana, y a mi lado derecho se sentó una señora, después de un tiempo de viaje, el carro chocó.
Chocó, contra otro carro que se había cruzado en el camino, dejando la luna de este destrozada, estuve tan cerca de la muerte que agradezco seguir vivo en este momento, bajé reclamando mi pasaje de regreso, y tomé otra combi hasta el canal 9. Al llegar y encontrar a mis amigos, todo el rencor hacia el conductor del anterior auto, se había ido.
La travesía de regreso a mi casa también fue un tanto movida, tomé la Chama en la avenida cuyo nombre no conozco, y pagué un sol veinte hasta Plaza San Miguel, el camino fue normal, iba a sacar mi celular para tomarle fotos a las hermosas calles de Lima, pero no tenía bateria, así que seguí con el camino. Cuando bajé en Plaza San Miguel, volví a tomar una combi, hasta Rocky's de faucett, en el camino, el enfermo del chofer le gritaba asquerosidades a las chicas agraciadas que pasaban delante del carro, me daba tanta rabia. Cuando llegué a Rocky's, hice mi inspección de bolsillo "Llaves, audifonos, celular, inhalador, dinero, ce..." No pude evitar gritar PUTA MADRE, mi celular, el mas bonito, mi Nokia 5200 no estaba en ninguno de los bolsillos; mientras caminaba hacia el paradero de Moto-taxis para ir a mi casa, meto la mano en el bolsillo derecho, y lo primero que saqué fue mi celular, que alivio, sentí como el color volvía a mi rostro, siemore había estado allí el celular, solo que un poco mas arriba.
En los viajes automovilísticos que he tenido el día de hoy, me he dado cuenta de que las calles de Lima, a pesar de tener tanta basura en el piso, son hermosas, con rostros tan curiosos que puedes olvidar después de cinco segundos, pero son hermosas. Puedes estar en una zona de gente con dinero, y un par de cuadras después, llegar a una calle que está pintada con graffitis en cada rincón, es muy sorprendente.
Larga vida a Lima.
Joshua
2 comentarios:
Es interesante que puedas unir mas de 3 palabras con sentido gramatical alguno jajaja xD! a mi tb me paso algo, cuando iba a bajar hoy de regreso a mi casa en el Metro de la UNI y ya estaba bajando, le dije al cobrador.. un toque (revise mis bolsillos y nop habia celu) un toque, no tengo mi celular sr.
El pata me dijo: Srta. esta en su mano xD! alaa chess..¬¬ roche jajajaja
Buena cronica, salu2
Es correcto Joshuasam.
Es cierto y certera tu crónica de viaje.
Debo aceptar que viajar en Combi, especialmente en la avenida Arequipa, es para mí uno de los placeres más grandes e increibles que puedo tener, claro debo ir sentado.
Las inspecciones son de rutina en estas travesías.
Paz y espero sigas conociendo todas las líneas posibles.
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