Bienvenidos

Muy buenas noches, mis queridos internautas!


Esta es mi primera publicación en mi nuevo blog.

En este blog contaré historias verdaderas que suceden en mi vida (:

Primero me presentaré

Mi nombre es Joshua Lagunas, curso el 5to año de secundaria en el colegio nacional Dora Mayer en Bellavista Callao, mis notas no son excelentes, pero tampoco desatrozas, disfruto mucho pasar tiempo con mis amigos, mis mejores amigos son:
-Renato
-Ligny
-Franco
-Ely
-Rox
-Memma
-Mayron

Etc, no menciono a mas por que la lista quedaría muy larga, a veces pienso que no tengo mejores amigos, sino, simplemente amigos de verdad, y a los que consideraba simplemente como mis "amigos" no son mas que conocidos.

Tengo 15 años, según mis padres es la mejor edad que alguien puede tener, según yo, es un tanto dificil.

Mi primera publicación hablará de lo que está pasando en estos momentos por mi vida, aquí les va:


Es la 1:08 AM del dia 24 de Enero del 2009, es mi sexto día con la varicela, la peor enfermedad que le puede dar a alguien, estoy sentado en la computadora, escuchando algo de música de Pink y en el msn, siento mucha escozor por que ya se están secando mis ampollitas, y no tengo nada de sueño por que ya he dormido cinco horas en la tarde.

No piso la calle desde el domingo pasado, había salido al parque con mis amigos, Mario, Renato II, Mariale, Danika, Ximena y Antonella, sentía un fuerte dolor de cabeza desde la noche anterior, pero no le tomé mucha importancia hasta que vi una ampolla en mi ante brazo derecho, pensé: Tal vez puede ser varicela, pero no creo por que no me pica, y a parte, es la única.

Entré a mi casa y se lo comenté a mi mamá y me dijo: "Así empezó Briana, con una ampollita en el hombro", volteé a ver a Briana y estaba llena de diminutas costras en todo su cuerpo, Briana es mi sobrina de seis años.

Con esta advertencia de mi mamá, fui a dormir, con un poco de miedo por despertar y ver mas ampollitas en mi.

A la mañana siguiente tenía unas cuantas ampollas más, lo cuál me decepcionó, me decepcionó el simple hecho de saber que no podría salir de casa hasta que se me caiga la última costrita, aunque cuando ya está cicatrizado es seguro salir, pero me preocupaba el famoso "¿Que dirán?".

En estos días no he hecho más que estar en cama viendo televisión o en la computadora.

Hoy vino a visitarme mi gran amiga Morgana, por que a ella ya le había dado.
Estuvimos conversando y jugando Mario 64.

Después de la visita de Morgana subí a mi cuarto y me heché a dormir, y ahora estoy acá escribiéndoles mi historia, después de todo lo que pensé con respecto a la varicela, ahora le veo algo bueno, la varicela me hizo comprender que a mis cortos quince años de vida no he vivido lo suficiente, que aún me queda mucho para vivir.

Gracias varicela, por hacer de estos seis días los más miserables, pero realistas de mi vida, gracias.